CEREMONIA INTERRELIGIOSA EN LA CATEDRAL
"La
Eucaristía es la piedra angular de la Iglesia Católica, Cuerpo místico de
Cristo. Si la Eucaristía fuera desechada o destruida, todo el edificio católico
colapsaría. Despojada la Iglesia Católica de la Misa, no sería más que un
esqueleto. La historia nos muestra que los que así lo hicieron, llevaron el
caos y la destrucción a quienes los siguieron.
Sin
duda, la supresión del Santo Sacrificio de la Misa, sería la mayor abominación
de la desolación: «Este es el Sacrificio de nuestros altares, que entonces, en
esos terribles días, será proscrito, en todas partes prohibido; y, salvo los
Sacrificios, que podrán celebrarse en las sombras subterráneas de las
catacumbas, quedará interrumpido en
todas partes» (Cardenal Billot, S.I.)
Cristo
cumplirá su promesa de llegar a nosotros para juzgarnos, pero las señales por
Él indicadas se están dando permanentemente, por lo que es arriesgado señalar
fechas determinadas, y, sea lo que sea «la abominación de la desolación», no
debemos olvidar que será la señal del momento final.
Si lo
que vemos cada día: confusión doctrinal, sacrilegios de los lugares sagrados,
sacrilegios de la Eucaristía y de la Misa, no es la «abominación de la
desolación» predicha por Nuestro Señor, son al menos un presagio de aquella
última profanación." (
¿Qué nos está sucediendo a los católicos que permitimos estas humillantes profanaciones de nuestros Templos bajo las consignas masónicas de: "Libertad, Igualdad y Fraternidad"? Por qué no montan semejante espectáculo político en una Sinagoga, en una Mezquita o mejor aún en el Centro de Convenciones de Costa Salguero.
"El
celo por tu casa me consumirá" (...) "Destruyan este templo y en tres
días lo volveré a levantar". (Jn 2: 17, 19)
Expulsión de los mercaderes del templo |
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Se ruega hacer comentarios respetuosos. Sin disenso no hay consenso...